En pleno corazón del encantador barrio judío, descubrirás Santa María la Blanca, un nombre que podría sonar a templo cristiano, pero que en realidad fue una sinagoga. Esta es una de las dos sinagogas que aún se conservan en Toledo y una de las únicas cinco sinagogas medievales que se mantienen en toda España.

A primera vista, su fachada puede parecer austera, pero no te dejes engañar por las apariencias. La verdadera belleza de Santa María la Blanca se revela en su interior. En 1411, este antiguo lugar de culto fue convertido en iglesia, y desde entonces ha conservado su esplendor. Así que te invitamos a cruzar sus puertas y adentrarte en su interior, donde encontrarás un tesoro de arquitectura y arte que te dejará maravillado. Recuerda, la verdadera belleza siempre se encuentra en el interior. ¡No te lo pierdas! 

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